La violencia NO es el camino

Esto NO es independentismo, que no os engañen

Después de ver cómo destrozan Barcelona por quinta noche consecutiva, y vamos para la sexta, que parece ser que esto no ha terminado, solo queda decir dos palabras: ¡BASTA YA!

Se protesta por la sentencia del «procés», en eso estamos de acuerdo, es totalmente desproporcionada. Una sentencia pactada de antemano por un Poder Judicial que, no nos engañemos, en este país no es independiente.

Se reivindica la independencia de Catalunya, en eso también estamos de acuerdo, siempre he pensado que a Catalunya le iría mucho mejor como territorio independiente. Pero los actos violentos sobran.

La violencia no nos lleva a ningún sitio, la imagen con la que se está quedando el mundo no es el ambiente festivo de la manifestación de ayer tras las «marxes per la llibertat» (marchas por la libertad), en la que participaron alrededor de 500.000 personas sin ningún tipo de incidente. Lo que se ve, porque además es lo que interesa enseñar, son los disturbios creados por un grupo de unas 400 personas (cifra indicada por el ministro de Interior), por lo visto organizadas y dirigidas por expertos en guerrilla urbana, que con la excusa de las reivindicaciones independentistas están haciendo arder la ciudad (y otras ciudades de Catalunya).

El Gobierno parece que esté mirando hacia otro lado, el President de la Generalitat no acaba de condenar los actos violentos y parece ser que nadie quiere sentarse a negociar. Estamos perdiendo ventas, turismo e imagen. ¿A quién le interesa que esté pasando todo esto? ¿por qué nadie está haciendo nada?

Y no, la solución no es un estado de emergencia, ni traer al ejército, ni más acciones antidemocráticas. La solución pasa por sentarse a dialogar y llegar a un acuerdo, todos los implicados.

Duele ver tu ciudad así, y eso que esto solo pasa en la zona más céntrica, en el resto de barrios ni nos enteramos, pero jode mucho ver noche tras noche algunas calles en llamas. Independencia, sí, pero este tipo de actos no me representan. ¡BASTA YA!


Sentencia del «procés»: día negro para la Historia de España

Concentración en la Plaza Sant Jaume de Barcelona, hoy
(Foto: Europa Press)

Hoy se ha conocido la sentencia para los líderes del «procés». Penas entre 9 y 13 años de cárcel. Se les acusa de sedición y malversación.

Vergüenza de sentencia, más propia de un estado totalitario que de un estado democrático y de derecho. Trece años por poner unas urnas y permitir votar al pueblo catalán mientras otros que han estado saqueando al Estado durante años se han ido de rositas. Pretenden callar a los catalanes a base de represión. Está claro que en este país el Poder Judicial nunca ha sido independiente, sino que está a las órdenes de los políticos de turno.

No ha habido sedición, ni golpe de Estado, ni llamadas a la violencia. Se ha condenado a estas personas únicamente por sus ideas, no por lo que hayan podido hacer.

Eso sí, en los medios de (des)información solo sale lo que interesa, a los catalanes solo nos falta desayunar bebés.

Nunca creí que diría esto, pero ahora mismo me avergüenzo de mi nacionalidad.


Joker

He ido al cine. Hacía años que no iba, de la última vez ni me acuerdo. Porque es más cómodo ver las pelis online sin moverte de casa y porque el cine es un robo a mano armada de 9 euros.

Pero fui hace un par de días a ver Joker. Había leído recomendaciones de que esta era para verla en el cine y además aún tardará en salir online con una calidad aceptable, así que hice el esfuerzo y fui. Y ha sido una de las mejores cosas que he hecho últimamente.

Es un peliculón, se mire por donde se mire. Y Joaquin Phoenix está soberbio, es impresionante el papelón que hace. Sinceramente espero que le den el Oscar.

No voy a explicar la película porque se acaba de estrenar y esto me quedaría lleno de spoilers, solo diré que el personaje me inspira empatía. Mucha. Es un ser atormentado al que nunca más podremos ver como el malo de la peli después de ver esto. Y repito, la actuación de Phoenix es sublime. Una película que recomiendo y además recomiendo verla en una pantalla de cine.

Greta Thunberg y las huelgas del clima

Greta Thunberg
(Foto: Jason DeCow / AP)

Estamos de acuerdo en que hay que cuidar el planeta, que nos lo estamos cargando entre todos con contaminación de fábricas, de coches, con plásticos y con basuras de todo tipo. Matamos animales sin ningún miramiento y por diversión. Talamos y quemamos bosques, etc.

Aún así no acabo de creerme mucho el rollo del cambio climático. Hace muchos años que sabemos que el clima en la Tierra es cíclico. Es decir, ha habido calentamientos y enfriamientos desde que existe el planeta. Ahora se habla de «emergencia climática», unas palabras que están muy de moda y parece que las generaciones más jóvenes están tomando conciencia sobre el tema. Y como ejemplo de este movimiento social que protagoniza la juventud encontramos a Greta Thunberg.

Pero ¿quién es Greta Thunberg? Buscando por Internet y sin escudriñar mucho por falta de tiempo averiguo que Greta es una niña de 16 años, sueca, y sus padres son artistas bastante conocidos en su país (la madre incluso representó una vez a Suecia en Eurovisión).

Greta está muy concienciada con esto de la «emergencia climática» y, un buen día, decidió ponerse en huelga y protestar ante los políticos de su país y en foros internacionales. Además se volvió vegana y se niega a viajar en avión. Pues vale.

El caso es ¿quién está detrás de Greta Thunberg? ¿alguna multinacional, quizás? Porque también se sabe desde hace tiempo que el negocio del cambio climático mueve muchos millones. Y Greta Thunberg no viaja sola. Ella se va a la ONU, monta la pataleta, desencaja su semblante como si entrara en trance, pero detrás de las cámaras está el padre, que viaja con ella, controlando el cotarro.

No voy a insultar aquí a Greta como hacen en otras páginas y foros, porque es una niña y porque quiero pensar que ella cree en lo que hace. Pero ¿no la estarán utilizando? ¿no debería estar en el colegio como cualquier persona de su edad, formándose para hacer de este mundo un lugar mejor llegado el momento? Porque mucho ir a Davos y a la ONU pero ¿cuántas playas ha ido a limpiar?

Salvemos el planeta, sí, porque es el que tenemos y es nuestro hogar, dejemos de estropear y contaminar la Tierra, pero no convirtamos a esta niña en una especie de Juana de Arco del siglo XXI porque, sinceramente, creo que ese no es el camino.